Según los que lo apoyan, el fracking es una técnica que da solución a la creciente demanda de energía con recursos más limpios que el carbón. Según sus críticos, se considera un grave riesgo para la salud y el medio ambiente. En definitiva, el fracking es un tema polémico que hay que analizar con más detalle.
Qué es el fracking:
El fracking o fracturación hidráulica es una técnica para posibilitar o aumentar la extracción de gas y petróleo del subsuelo. Este sistema permite extraer el gas de esquisto, un tipo de gas natural que sirve como combustible, y que se encuentra atrapado entre capas de roca a una gran profundidad bajo la tierra.
El proceso de fracking consiste en la perforación de la tierra hasta alcanzar la roca de esquisto (donde se encuentra el gas), para luego inyectar a alta presión grandes cantidades de agua con aditivos químicos y arena, para así fracturar la roca y liberar el gas, el cual fluye de regreso con parte del fluido inyectado al principio.
Por qué debería importarte:
El fracking conlleva riesgos altísimos para la salud, la seguridad y el medio ambiente. Entre ellos están la contaminación de acuíferos, la emisión de contaminantes que afectan la calidad del aire, la posible migración de gases y componentes químicos usados durante el proceso a la superficie, los riesgos asociados a la inadecuada gestión de los residuos, y los efectos que estos puedan tener en el entorno natural y en la salud humana. Según un informe emitido en el 2011 por la Comisión del Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria del Parlamento Europeo, la fracturación hidráulica “produce una emisión de contaminantes a la atmósfera, contaminación de las aguas subterráneas debido a caudales de fluidos o gases provocados por escapes o vertidos, fugas de líquidos de fracturación y descargas no controladas de aguas residuales, así como la utilización de más de 600 productos químicos para liberar el gas natural”.
En Colombia, donde el fracking ha sido un tema polarizante, el gobierno está tramitando proyectos en conjunto con las empresas Ecopetrol, ExxonMobil, Drummond Energy y Tecpetrol para su implantación en la cuenca del Río Santander, cosa que afectaría la vida de las miles de personas que viven en el municipio de Puerto Wilches. El pueblo colombiano sigue a la espera de la decisión del Consejo de Estado que decidirá si les dará luz verde a estos planes piloto de implantación del fracking.
Los promotores del fracking prometen importantes ventajas incluso para el medio ambiente. Pero detrás de esas promesas se esconden cuestiones puramente económicas. Aunque el fracking tuviera éxito, lo único que se produciría es la prolongación de la dependencia de los combustibles fósiles, que son limitados e incompatibles con el clima. El estudio Renovables 100% conducido por Greenpeace España demuestra que se puede alcanzar un sistema energético totalmente basado en recursos naturales renovables, y que no tiene sentido desviar recursos y esfuerzos que deberían ir hacia esas energías limpias y eficiencia energética en proyectos como el fracking, que solamente potencian los riesgos medioambientales asociados a este tipo de extracción de combustibles.
