Cómo Sevilla convierte las naranjas en energía

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Contribuyendo a una economía circular, la ciudad española de Sevilla decidió esta primavera tomar riendas sobre el asunto y aprovechar la enorme cantidad de naranjas que tiene para generar energía. Sevilla tiene 5.7kg de fruta repartidas en los árboles de la ciudad, por lo que aprovecharlas tiene muchos beneficios para reducir el desperdicio y para intentar desarrollar nuevos proyectos. Así, la empresa municipal de aguas Emasesa ha decidido reciclar naranjas para devolver electricidad a la red de la ciudad. 

¿Cómo se genera energía a través de naranjas?

Con este proyecto, el 50% de las naranjas se emplea para extraer su zumo y se envía a un proceso de digestión anaeróbica el cual lo convierte en biogás. Tras ser quemado con motores de generación, estas instalaciones son autosuficientes energéticamente. Esto es un ejemplo de cómo las ciudades pueden contribuir a la economía circular además de crear beneficios medioambientales. Por otra parte, juntando los residuos con el ciclo del agua, este proyecto demuestra que es posible generar energía. Pero no sólo esto sino que para cerrar el proceso, este proyecto utiliza el compostaje de las naranjas para devolver el carbono al suelo y beneficiar la agricultura.  

Beneficios:

  • Sociales: Para llevar a cabo este proyecto, esta compañía ha contratado a más de 200 trabajadores lo que ha contribuido a un mayor empleo. Además, las naranjas extra de la ciudad empezaban a ser un problema ya que no se sabía que hacer con ellas. 

  • Económicos: Con esto no sólo la ciudad gana valor añadido sino que ahorra en gasto de residuos. Lo mas importante, reciclando éstas naranjas, se devuelve energía a la red pudiendo proporcionar electricidad a 73.000 casas, según los ensayos. 

  • Medioambientales: Y por último, está claro que este proyecto contribuye a una economía circular a través del reciclaje y la reutilización de naranjas. Con esto, habrá menos problemas con los naranjos en las calles de la ciudad. De hecho ya se han situado 340 contenedores para que la gente deposite las naranjas y se puedan utilizar para generar biogas a posteriori 

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